Cuatro delincuentes cometieron ayer un robo en la joyería zaragozana Magani, tras romper a hachazos el escaparate del establecimiento, ublicado en la céntrica calle de Isaac Peral. El asalto se produjo alrededor de las once y media de la mañana y uno de los delincuentes fue detenido cuando huía.

Según explicó el encargado de la joyería, Anil, "los delincuentes eran cuatro e iban en dos motos. Dos esperaron en la calle mientras los restantes intentaban romper con un hacha las lunas".

Los asaltantes consiguieron abrir un agujero en el cristal, por donde introdujeron un brazo para apoderarse de los relojes. "Nosotros, desde dentro, intentamos retirar las piezas de las vitrinas, pero uno de los asaltantes comenzó entonces a dar hachazos en el cristal de la puerta", añadió el encargado.

La secuencia el robo apenas duró dos minutos, y los responsables del establecimiento, tras la sorpresa inicial, accionaron el mecanismo de cierre de las persianas exteriores, al tiempo que utilizaban el sistema de alarma conectado con la Jefatura Superior de Policía.

"Los delincuentes huyeron al advertir que se estaban cerrando las persianas y los policías se presentaron rápidamente, cuando apenas habían transcurrido cinco minutos", manifestó Amil, quien se mostró preocupado por la oleada de asaltos contra joyerías españolas, "más de 20 en las últimas semanas", y que hace un mes afectó a Baena, situada muy cerca Magani.

Cuando los delincuentes huían tuvieron algún problema maaacánico con una de las motos, por lo que dos de ellos continuaron la fuga a pie. No obstante, la colaboración de los ciudadanos, que señalaron a la Policía el lugar por donde iban, permitió a los agentes la detención de un saltante, en cuyo poder se recuperaron parte o la totalidad de los relojes sustraídos.

El delincuente, del que no se ha facilitado la identidad, fue trasladado a depednencias policiales, donde se le sometió a un interrogatorio mientras prosiguen las investigaciones para identificar y detener a sus cómplices.

Desde que el establecimiento abrió sus puertas en la calle de Isaac Peral, frente al Gran Hotel, los propietarios de Magani no han tenido ningún incidente, "y tampoco en la joyería que tenemos en San Ignacio de Loyola, donde llevamos más de diez años", agregó Anil.