El Salud publicó ayer en el Boletín Oficial de Aragón (BOA) la adjudicación de los traslados convocados en el mes de abril del año pasado. En total, se trata de 320 movimientos de profesionales con plaza fija entre hospitales de la comunidad, si bien la inmensa mayoría de destinos son centros de la capital aragonesa, algo menos de 30 en Huesca y apenas unas pocas en Teruel, Alcañiz o Barbastro.

Según indica el texto, los adjudicatarios deberán abandonar su plaza actual en el periodo de tres días hábiles a contar desde el día 15 de febrero, «salvo que puedan derivarse problemas de cobertura asistencial, en cuyo caso el cese podrá demorarse por el tiempo indispensable para la adecuada resolución de los mismos».

La toma de posesión de la nueva plaza se efectuará dentro de los tres días hábiles siguientes al del cese si la plaza desempeñada y la adjudicada son de la misma provincia, en quince días si pertenecen a distinta provincia, o en el de un mes si la plaza desempeñada corresponde a otro servicio de salud.

Esta resolución inicia un nuevo proceso marcado por el cambio de sistema designado para la cobertura de esas plazas que ahora quedarán vacantes tras la salida de sus actuales ocupantes hacia su nuevo destino. El Salud anunció recientemente la creación de una lista única de interinos, a la que se recurrirá para adjudicar esas vacantes. Hasta ahora, esa asignación se realizaba a través de cada centro hospitalario, pero, una vez que quede configurado el mapa de plazas que dejan libres los profesionales que se trasladan, se efectuará un llamamiento único. El que mejor puntuación tenga de los 1.400 interinos que comforman la bolsa única elegirá plaza y así sucesivamente. Si un interino no acepta plaza, quedará relegado al final de la lista.

El objetivo de esta medida es que esas plazas que tradicionalmente no se ocupan porque son rechazadas por los interinos dejen de estar vacías y, con ello, favorecer la cobertura de puestos en hospitales periféricos. Fuentes de la Administración sanitaria recordaron, en este sentido, que esta fase de concurso de traslados es previa a la de oposición --Sanidad se comprometió con los sindicatos a alternar traslados y oferta pública de empleo cada dos años-- en la que los interinos tendrán la oportunidad de lograr una plaza fija. En todo caso, desde algunos sectores --colectivos de interinos principalmente- el nuevo sistema no ha sido acogido con agrado y ha recibido numerosas críticas.