El Gobierno aragonés e Instituciones Penitenciarias negocian la ampliación del ala de vigilancia para presos en el hospital Miguel Servet, que se incluirá en las obras que se realizan actualmente en Traumatología. El coste correrá a cargo de la Sociedad Estatal de Equipamientos e Infraestructuras Penitenciarias.
La ampliación del ala de seguridad ya se planteó en el 2001, con anterioridad a la puesta en funcionamiento de la cárcel de Zuera y ante la previsión de un fuerte aumento de la población penitenciaria en la provincia de Zaragoza, según informaron fuentes de Instituciones Penitenciarias.
2.060 PRESOS En la actualidad, 2.060 presos se encuentran internos en las prisiones de Zuera y Daroca, una población que ha dejado pequeñas las actuales instalaciones, inauguradas hace doce años. Además, el número de reclusos tiende a incrementarse, ya que la primera prisión aún podría acoger a otros 200 y la de Daroca cuenta ahora con 100 internos menos que hace dos meses.
Además de los internos, el área de seguridad también ha acogido a personas detenidas, especialmente a aquellas que son remitidas por los jueces de instrucción para ser sometidas a análisis o a estudios psicológicos.
El área de seguridad del Servet se creó para centralizar a los presos que necesitan ser hospitalizados y optimizar los servicios de vigilancia de la Policía. Con anterioridad a su puesta en marcha, los reclusos enfermos eran ingresados principalmente en el hospital Provincial, aunque su limitación de plazas obligaba a dispersarlos por otros centros sanitarios.
Las fuentes consultadas señalaron que las necesidades actuales se cifran entre 30 y 50 plazas, según los índices que maneja Instituciones Penitenciarias en relación con la población total de presos de la provincia.
Las actuales obras de remodelación del centro de Traumatología han obligado desde hace dos semanas a cerrar el área de vigilancia y los presos que se encuentran hospitalizados en Zaragoza han sido distribuidos en tres centros.
En las conversaciones entre el Salud e Instituciones Penitenciarias también han intervenido responsables de la Jefatura Superior de Policía para informar a las partes sobre las necesidades en materia de vigilancia.
