Desde que comenzó la pandemia del coronavirus, el Gobierno de Aragón ha reforzado los servicios sanitarios con más de 1.500 contratos nuevos, tal y como confirmó ayer el gerente del servicio aragonés de Salud, Javier Marión. En concreto, indicó que se han efectuado 1.498 contratos nuevos, eventuales y de sustitución, y otros 118 contratos extraordinarios de los permitidos por el decreto ley del Gobierno central a profesionales jubilados o estudiantes de último año.

Según especificó Marión, entre los primeros tipos de contratos se ha sumado a 79 médicos, 657 enfermeros, 421 técnicos auxiliares de enfermería, 215 celadores y otros 126 para otro tipo de profesionales, desde asistencia telefónica, especialistas en rayos o conductores.

Por otro lado, entre los 118 contratos extraordinarios firmados en estas semanas de crisis, se encuentran los de los profesionales jubilados y los estudiantes de Enfermería y Medicina de último año. A todos ellos hay que añadir la «mejora de contrato» a los residentes de último año.

Javier Marión explicitó que «se ha agotado las bolsa de empleo de enfermería», y reconoció que, durante los días más acuciantes de la pandemia, se produjeron algunos desajustes como que «el Salud le robaba enfermeras a los Servicios Sociales». Tal era la demanda y la celeridad con que se producían los contratos que las profesionales recibían la llamada de ambos servicios al mismo tiempo.

De este modo, Marión indicó que se ha contratado a «todos los médicos y enfermeros que se han podido contratar y estaban disponibles en Aragón» de especialidades relacionadas con esta pandemia.

Por su parte, el Colegio de Médicos de Zaragoza volvió a reiterar la disposición de su registro de médicos voluntarios, que cuenta con 370 médicos voluntarios. El colegio lamentó, asimismo, que se prescindiera de los servicios de los 18 voluntarios médicos derivados al 061.