Un informático del hospital universitario Miguel Servet de Zaragoza afronta una condena de 4 años y un día de prisión por, supuestamente, filtrar un examen de una oposición a su esposa. Esta mañana iba a ser juzgado, si bien ha tenido que suspenderse por la enfermedad de su defensa. Su abogado sufrió un cólico nefrítico, una enfermedad que casualmente es la especialidad médica de la mujer del encausado, Antonio L. M.
Los hechos por los que tendrá que volver a la Audiencia Provincial de Zaragoza para sentarse en el banquillo se remontan al 11 de mayo del 2018 cuando el tribunal de una oposición para facultativo especialista de Área de Nefrología en centros del Salud en abril del 2017 alertó de la sospecha sobre los resultados de examen de una de las aspirantes. En concreto, de la calificación de 97.33 puntos de un máximo de 100 conseguida por una mujer en el examen realizado el 23 de febrero. Este tribunal alertaba que había recibido información de que esa opositora era la esposa del encausado, quien era técnico de gestión de sistemas y tecnología de la información.
Una información que recibió el director gerente del Salud que solicitó al servicio informática del Salud para que custodiara la información que obraba en los soportes informáticos. La auditoría interna concluyó que Antonio L. M. se valió de sus claves personales y de los permisos informáticos que tenía para localizar el archivo del examen, abrirlo e informar del contenido a su esposa, que tan solo falló dos preguntas. Casualmente, una de estas había sido cambiada en el último instante por el tribunal de la oposición. Incluso, según las pesquisas internas, creó una serie de rutas web de ficheros “para no levantar sospechas”.
Unos hechos por los que la Fiscalía solicita 4 años y un día de prisión, al igual que los servicios jurídicos del Gobierno autonómico que solicitan una multa de 18.000 euros. Este hombre también se enfrenta a una pena de inhabilitación absoluta para empleo o cargo público por el tiempo de 11 años.
La DGA mantiene apartado provisionalmente de su puesto al funcionario a la espera de la Audiencia de Zaragoza dicte sentencia.
