El gerente del Servicio Aragonés de Salud, José María Arnal, envió ayer una circular interna a todos servicios sanitarios advirtiendo de que los protocolos oficiales «no contemplan» la prescripción médica de los test de autodiagnóstico de anticuerpos que, desde la semana pasada, ya se venden en farmacias, y, por tanto, está de algún modo prohíbida la emisión de estas recetas desde la red pública.
Según el documento, al que ha tenido acceso EL PERIÓDICO, se especifica que los profesionales sanitarios del Salud se limitarán «exclusivamente» a indicar las pruebas diagnósticas de «infección activa de coronavirus» cuando se considere «su indicación clínica en función de la sintomatología y el contexto epidemiológico del paciente». Asimismo, Arnal apunta que esto deberá hacerse «siempre en consulta», donde se deberá determinar el diagnóstico.
La notificación, que fue enviada a la gerencia del 061 y de los diferentes sectores sanitarios, así como a las direcciones de todos los hospitales de Aragón y de Atención Primaria, insiste en que estos test serológicos «no están contemplados» en ninguno de los dos documentos oficiales de actuación. Se refiere el gerente del Salud a la Estrategia de detección precoz, vigilancia y control del covid, del Ministerio de Sanidad; y al Procedimiento general de atención sanitaria al covid en Aragón, del Departamento de Sanidad.
«En estos documentos se establecen las indicaciones de las diferentes pruebas diagnósticas en función de los ámbitos y la clínica de las personas en que se realizan. Como se recoge expresamente en ambos, no se recomienda la realización de ningún tipo de prueba serológica para el diagnóstico de infección activa ni en personas con síntomas ni tampoco en asintomáticos», esgrime Arnal. El gerente del Salud, además, recuerda, que «todas las actuaciones» llevadas a cabo por la consejería «durante toda la pandemia» están basadas en los protocolos de vigilancia oficiales «que se van actualizando periódicamente».
Consultas saturadas
Para adquirir uno de estos test de anticuerpos, que cuestan 25 euros en las farmacias, es obligatorio que el paciente presente una receta médica. Esta, obviamente, se la debe prescribir un médico. En este sentido y en última instancia, el gerente del Salud pide que el contenido de la circular se comunique a todos los sanitarios con el fin de que sean conscientes de la situación, no atiendan a pacientes para este fin y, en definitiva, «no sobrecargar las consultas, ya de por sí saturadas fundamentalmente en el ámbito de Atención Primaria», indica Arnal.
Estos test no están dirigidos, en ningún caso, a las personas que sospechen que están contagiadas y quieran confirmarlo, porque no detectan la presencia del virus. De hecho, si el resultado el positivo tras la prueba, el usuario debe comunicarlo a su médico para someterse a una PCR y conocer si los anticuerpos que figuran son actuales y está contagiado o bien están generados por haber pasado la enfermedad en otra ocasión
