Una mujer de 32 años y de nacionalidad nigeriana fue salvajemente violada tras ser asaltado su domicilio en el Actur por un conocido, que la arrastró por el suelo, la amordazó y la golpeó mientras la penetraba repetidamente. El agresor, que fue ingresado ayer en prisión, la amenazó de muerte si denunciaba los hechos a la Policía antes de abandonar la vivienda.

Los hechos ocurrieron el pasado viernes. A la una de la madrugada se presentó en el domicilio de la víctima, Oscar D. V., de 21 años y nacionalidad guineana, y la mujer le franqueó la entrada sin sospechar de él por ser una persona conocida.

Una vez en la vivienda, el visitante se abalanzó sobre la mujer, la amordazó con celofán y la arrastró por el piso mientras le propinaba golpes en diversas partes de su anatomía. Finalmente le ató las manos y los tobillos a su cama y le arrancó la ropa, penetrándola en varias ocasiones y sometiéndola a numerosas vejaciones.

Antes de abandonar la casa, el agresor la amenazó de muerte para que no relatara lo ocurrido a la Policía ni a su familia.

Sin embargo, la víctima solicitó la ayuda de una vecina, que alertó al 091. Según la Policía, la mujer explicó que la habían agredido sexualmente y le habían intentado asesinar en su domicilio.

Efectivos policiales se desplazaron a la vivienda y trasladaron a la mujer al hospital Clínico, donde los médicos que le asistieron apreciaron que presentaba múltiples hematomas en todo el cuerpo y lesiones cortantes en el cuello, los tobillos y las muñecas producidas por ataduras. Asimismo, también tenía cortes en un párpado y otras lesiones.

Los médicos sometieron a la mujer a una revisión ginecológica y diagnosticaron que presentaba lesiones compatibles con una violación, por lo que recogieron muestras vaginales para un posible análisis del ADN del supuesto agresor.

La víctima explicó a las agentes del Servicio de Atención a la Mujer de la Policía que conocía al agresor por vivir en el mismo barrio del Actur y le identificó totalmente.

Las policías se trasladaron al domicilio del sospechoso y procedieron a su detención. Oscar D. V. negó que hubiera cometido una violación, aunque reconoció que había mantenido relaciones sexuales con la denunciante que fueron consentidas mutuamente.

La misma versión fue mantenida ante el juez de guardia, quien decretó el ingreso preventivo del detenido en la cárcel de Zuera después de que el ministerio fiscal solicitara la aplicación de esta medida.