Los inspectores de Sanidad analizaron ayer la red de tuberías utilizada por los bomberos para distribuir el agua a los vecinos de Obón, desde que el pasado viernes se quedara el municipio sin suministro por la rotura de la bomba extracción del Pozo de la Vida. Un vecino denunció el lunes que esta red se encontraba contaminada y que el agua que salía "era barro" ya que llevaba años sin ser utilizadas.

José Albesa, vecino de Obón, señaló que "el alcalde del municipio se empeñó en distribuir el agua a través de esta red en lugar de hacerlo directamente a los vecinos, como habían indicado los bomberos". El estado de abandono de las antiguas tuberías "ha provocado que el agua no sirva para beber", según explicó Albesa. Por su parte, el alcalde, Miguel Villuendas, aseguró que sólo ha hecho lo que debía: "garantizar el suministro de agua mientras no se subsane la avería de la bomba".

Sin embargo José Albesa denunció el pasado lunes la supuesta "contaminación del agua" a la consejería de Sanidad, que ayer mismo desplazó a un inspector al municipio para analizar el agua. Según informaron fuentes de la consejería de Salud, hoy se redactará un informe para conocer la calidad del agua. Por otra parte, la denuncia ha provocado algunos enfrentamientos entre los vecinos de Obón, que actualmente se encuentra en fiestas.