El Departamento de Sanidad oficializó ayer una promesa, la dotación de ecógrafos a médicos de Atención Primaria. Lo hizo a través de la publicación en el Boletín Oficial de Aragón (BOA) de la licitación, por alrededor de 600.000 euros, de la compra de 32 ecógrafos y el diseño de un plan de formación dirigido a este colectivo.

El objetivo general de esta formación es incrementar la capacidad resolutiva en las consultas de Atención Primaria y capacitar al médico de familia para iniciarse en el uso de la ecografía clínica, aunque Sanidad también pretende, con esta medida, «integrar la técnica ecográfica en la actividad del centro, mejorar la capacidad diagnóstica del médico de Atención Primaria, disminuyendo la incertidumbre, aumentar la capacidad de resolución del primer nivel asistencial, acortar el tiempo de atención en situaciones potencialmente críticas o evitar desplazamientos a los pacientes», según indicaron ayer fuentes del departamento.

Por eso, la licitación de esta compra de ecógrafos supone «un primer paso» en esta implantación «que será valorado para su posible expansión». En esta primera convocatoria, 40 equipos de Atención Primaria se han mostrado interesados y 70 profesionales recibirán la formación. Todos estos equipos contarán con un aparato aunque algunos serán compartidos entre dos.

Los equipos de Atención Primaria interesados en hacer ecografías lo han comunicado a la dirección general de Asistencia Sanitaria y recibirán una formación consistente en cuatro sesiones teóricas, que se impartirán en diciembre, y sesiones prácticas individuales con un tutor en la propia consulta. «Se trata de introducir la ecografía como una herramienta útil y práctica en la consulta de Atención Primaria como prueba diagnóstica complementaria a la exploración clínica habitual».

La ecografía es una técnica «muy sensible, poco específica, lo que significa que se puede detectar muy bien si existen o no alteraciones estructurales en el órgano explorado y, cuando se detectan, no permite el diagnóstico definitivo, lo que hace necesario una segunda técnica, pero esto es precisamente la fortaleza de la Primaria, pues descarta patología y evita la derivación innecesaria, o, si se detecta, se optimiza la derivación y nos orienta hacia la técnica que nos ayudará a establecer el diagnóstico definitivo», subrayaron desde Sanidad.

Por eso, la «accesibilidad» que tiene el paciente al médico de Primaria hace posible que se pueda llevar a cabo el seguimiento de procesos banales o de reciente comienzo que no requieren derivación a la Especializada. «Además, la ecografía se ha hecho portátil, lo cual permite llevar esta herramienta hasta pacientes inmovilizados o con dificultades de desplazamiento». apuntaron.