El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, avaló y compartió ayer las acusaciones del concejal de Servicios Públicos, Alberto Cubero, a la jueza que instruye el caso del 010. Cubero declaró que la actuación de la magistrada estaba siendo «vergonzosa», que se había «inmiscuido» en asuntos que no eran de su competencia y que había «paralizado y bloqueado» las alternativas presentadas por el equipo de Gobierno para resolver el estado de indefensión en el que se encuentran las 14 trabajadoras del servicio de atención telefónica. Estas afirmaciones son «solo una crítica ante una resolución judicial» sobre el proceso de municipalización, aseguró el primer edil. Pero no las únicas. Porque Cubero ha repetido en reiteradas ocasiones que la Justicia es «parcial» y que «no es igual para todos» al posicionarse, a su jucio, a favor de la patronal de empresarios, la CEOE.
Santisteve, abogado y profesor en la facultad de Derecho, se sintió ayer acorralado por el portavoz del PSOE, Carlos Pérez Anadón, que trató de ponerle en evidencia. Durante la sesión plenaria le preguntó si «compartía» las decisiones del concejal sobre el rescate del servicio de atención telefónica y sus declaraciones en contra de los jueces. «¿Sí o no, alcalde?», preguntó Pérez Anadón muy directo. «Sí», respondió Santisteve.
Tanto el presidente del Tribunal Superior de Justicia de Aragón (TSJA), Manuel Bellido, como diferentes asociaciones judiciales aragonesas salieron en defensa de la titular del Juzgado de lo Contencioso Administrativo nº 4 de Zaragoza y acusaron al concejal de «deslegitimar» a la Justicia. Cubero no se achantó y le respondió acusándole de que su «silencio» estaba había provocado que las empleadas lleven casi tres meses sin cobrar.
Santisteve justificó las acusaciones de su concejal argumentando que fueron posteriores a la segunda cautelar dictada por la magistrada. «No son previas, por lo que no intenta interferir en la neutralidad o independencia del poder judicial», añadió el regidor.
NEUTRALIDAD
«Hay que preservar la necesaria neutralidad e independencia de los jueces y no alterar su forma de resolver y lo tengo que respetar, pero Cubero intentaba centrarse en la racionalidad de la decisión», trató de explicar sin convencer a nadie del salón de plenos.
Respecto a la deriva que ha adoptado el proceso de rescate del 010, el acalde también le brindó todo su apoyo al concejal. Recordó que, bajo juramento, Pyrenalia se declaró solvente y capacitado para seguir prestando el servicio. Semanas después le transmitió al ayuntamiento su intención de ceder el servicio a su filial, Datanoise. Ahora se ha declarado insolvente, «y su señoría dice ahora apáñenselas», después de volver a decretar las cautelares matizó el regidor. Para el alcalde, la decisión de la magistrada roza lo irracional. «La racionalidad tiene que estar presente en cualquier decisión judicial para que esté legitimada», apuntó cuestionando la decisión de la jueza.
«Estoy total y radicalmente de acuerdo en municipalizar el servicio. No que pase a gestión directa, sino que sea un servicio público y las trabajadoras pasen al ayuntamiento».
Cubero está a la espera de que el servicio de Contratación informe sobre si hay alguna posibilidad legal de permitir, ahora, la cesión del servicio a la filial Datanoise. «Es la única solución que nos ha dejado la jueza», aseguró este jueves durante la comisión extraordinaria sobre el 010 solicitada por el PP.
El concejal está dispuesto a autorizar el traspaso aunque asegura que no es la mejor alternativa porque la empresa no ofrece garantías de cumplir con sus obligaciones y, lo que es más importante, de subrogar a las 14 empleadas que siguen sin cobrar.
