«Lo que haya que tragarse, nos lo tragaremos. Y si hay algún sapo que hay que tragarse, nos lo tragaremos. La unidad y la respuesta a las demandas vecinales es lo primero». Así de contundente se mostró ayer el alcalde, Pedro Santisteve, con respecto a las posibilidades de que el Ayuntamiento de Zaragoza pueda aprobar un presupuesto para la ciudad antes de las próximas elecciones. En su opinión, ahora es más posible que hace un mes o dos, una vez que se han presentado enmiendas, aunque el PSOE le haya planteado mover más de 32 millones de euros de las cuentas aprobadas por ZeC.

«Presupuestos tiene que haber, sería una grave irresponsabilidad que no los hubiera, las entidades asociativas lo están exigiendo así y vamos a hacer todo lo que esté en nuestra mano, y lo imposible, para que sea así», expresó Santisteve, para quien este nuevo escenario representa una posibilidad que antes no existía. «Confío en ese giro que ha dado el PSOE presentando unas enmiendas, da buena sintonía, y parece que la vía de acuerdo está cada vez más cerca y vamos a darle un empujón entre todos», añadió. Él no se marca líneas rojas para facilitar un acuerdo: «Por el bien de la ciudad estamos dispuestos a todo», concluyó.

En medio de este pulso, Pilar Alegría, candidata socialista a la Alcaldía en las próximas elecciones, aprovechó su paso por la Cincomarzada para recordar a Santisteve que «Zaragoza lleva disfrutando de un presupuesto gracias a la responsabilidad y colaboración del PSOE». Apuntó que sí están «hablando con el Gobierno», pero también que «no ha llegado a un grado de ejecución del 50% ningún año». Y no es el mismo que arroja la DGA con las enmiendas de Podemos, que también acusa al PSOE de lo mismo. «Es más del 80%, los datos son claros y transparentes».