El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, remitió ayer una carta al director general de Tráfico, Pere Navarro, en la que ofrece su apoyo a la seguridad vial y la promoción de los entornos urbanos saludables y de calidad, y le solicita establecer el límite genérico de 30 km/h para más ciudades, como lo tiene Zaragoza. Le plantea en su escrito que se modifique la normativa nacional para que contemple la reducción de la velocidad máxima en las vías urbanas.

Santisteve recordó además otra de las reivindicaciones del ayuntamiento, como que «el ordenamiento jurídico nacional recoja las particularidades de la bicicleta en la ciudad», argumentando que la capital aragonesa en el 2009 fue «pionera en definir todas las calles de un único carril por sentido como vías pacificadas, con un límite máximo de 30 km/h y prioridad para bicicletas». Estas «suponen el 80% del viario» y «han contribuido a crear entornos más seguros, limpios y amables en las calles secundarias».

Adelantó en su escrito que en el Plan de Movilidad Urbana Sostenible (PMUS) solo las arterias de la malla básica mantendrán la limitación a 50 km/h. Para el resto, habrá Zonas 30 y 20, de prioridad residencial y supermanzanas.