El alcalde de Zaragoza, Pedro Santisteve, valoró ayer positivamente el anteproyecto de ley de la Vivienda de Aragón impulsado por el Gobierno autonómico, aunque señaló que todavía hay que determinar los pasos efectivos a seguir, así como la disposición de presupuesto para que no se convierta en un «brindis al sol».

El Consejo de Gobierno dio el visto bueno el martes al Anteproyecto de Ley de Vivienda de Aragón que contempla la vivienda como un derecho subjetivo y la posibilidad de expropiarla en el caso de que no cumplan la función social para la que está concebida.

Para Santisteve, la filosofía de esta propuesta «es buena» porque implica que las instituciones públicas puedan expropiar pisos desocupados para garantizar el derecho social a una vivienda digna para aquellos que carezcan de recursos. No obstante, explicó que por el momento solo se trata de un anteproyecto de ley, por lo que todavía se tiene que decidir «de dónde sale esa vivienda, de construcción propia o de pedir a los bancos que cedan ese activo inmobiliario a las entidades públicas».

Según Santisteve, las instituciones deben incidir en el mercado de alquiler y la construcción.