La jornada de huelga educativa convocada por el Sindicato de Estudiantes (SE) contra la Ley de Mejora de la Calidad Educativa (Lomce) --que entró en vigor este curso-- tuvo un seguimiento desigual ayer en Aragón, donde la incidencia en los institutos de la comunidad fue muy variada. Desde el IES Andalán, en el barrio zaragozano de La Almozara, apuntaron a media mañana que el seguimiento estaba siendo "prácticamente nulo", mientras que desde el equipo directivo del IES Miguel de Molinos, en el Actur, aseguraron "más de un 80%" del alumnado secundó la huelga. "Tanto en el segundo ciclo de la ESO (3° y 4°) como en Bachillerato la respuesta ha sido muy alta. Se informó muy bien del proceso, se dieron las indicaciones correctas y los chavales han respondido según su decisión", apuntaron desde el centro.

ESO Y BACHILLERATO

En el IES Miguel Catalán, ubicado en el barrio de La Romareda, señalaron que la huelga fue seguida de manera "medio alta". En este sentido apuntaron que en la ESO se dio un porcentaje del 50%, mientras que en Bachillerato se alcanzó el 75% de alumnado que secundó la convocatoria. En el IES Tiempos Modernos, también en el barrio del Actur, la ausencia de estudiantes en las aulas "apenas" se dejó notar. "No ha habido muchas faltas", indicaron desde la jefatura de estudios. En el IES Avempace, establecieron el seguimiento "entre un 15% y un 20%" del total del alumnado. "Quizás algo más en Bachillerato, pero con muy poca diferencia", añadieron.

Por la tarde, Marea Verde, la Plataforma por la defensa de la Escuela Pública de Zaragoza, sindicatos, representantes de partidos políticos, diversos colectivos sociales y educativos y numerosos estudiantes se concentraron ante la sede del Gobierno de Aragón como protesta por los recortes y pidiendo una "educación pública para todos". Los colectivos, que exhibieron numerosas pancartas reivindicativas, abrazaron el edificio Pignatelli con el objetivo de mostrar el rechazo a la implantación de la Lomce y a los "sucesivos recortes" en política educativa, al tiempo que piden recuperar unos presupuestos "dignos" para la educación.