El Plan de Dinamización Turística del Valle del Aragón va a tener una segunda prórroga, con el objetivo de concluir cuatro de las actuaciones enmarcadas en este programa. El plazo concedido es de seis meses y los proyectos a finalizar son los centros de interpretación de Villanúa, Canfranc y Aísa, además del lavadero de Ullé. A lo largo de este tiempo, también se certificarán y se justificarán todas las inversiones realizadas desde el comienzo del proyecto.

Con ésta ya son dos las prórrogas que se han solicitado para concluir un plan que comenzó en diciembre de 2000, con un presupuesto de 1.803.036 euros, a invertir a lo largo de tres años. Sin embargo, antes de que finalizara el 2003 la Asociación Turística Valle del Aragón (ATVA), entidad gestora del plan, vio que el ritmo que llevaban el Centro de Interpretación de las Cuevas de Las Güixas, en Villanúa, y el Museo de la Nieve y la Montaña, en Canfranc, no era el adecuado para finalizar la construcción en el plazo previsto.

A lo largo de los seis meses que duró la primera prórroga, los dos inmuebles han registrado algunos movimientos, pero aún está pendiente la instalación de la fontanería y los cerramientos exteriores. Se espera que en los seis meses solicitados nuevamente se puedan finalizar, además de otros dos proyectos: la construcción del Centro de Interpretación de Aísa y la rehabilitación del lavadero de Ullé, pedanía de Jaca.

CALIDAD La solicitud de la segunda prórroga se dio a conocer durante la II Jornada del Plan de Calidad del Destino Turístico del Valle del Aragón, que ayer se celebró en Jaca. La jornada sirvió para presentar a las 27 empresas que por ahora están adheridas al plan los procedimientos de autoevaluación que emplearán para avanzar en la calidad que los establecimientos ofrecen.

El gerente de la ATVA, Angel Bandrés, recordó los objetivos que persigue este nuevo plan, que ofrece una asistencia técnica gratuita, en principio, por dos años, y algunas de las empresas que se encuentran inmersas en él: "La idea es estandarizar la calidad por todos los establecimientos turísticos del valle, por lo que la mayoría de las empresas que se han interesado son restaurantes, hoteles y empresas de deportes y aventura". Cabe destacar la participación de las estaciones de Astún y Candanchú, a pesar de que ya cuentan con la Q de Calidad, del Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE), y la futura incorporación de la Gestora de San Juan de la Peña.