Un atracador zaragozano que el pasado verano asaltó a punta de navaja ocho tiendas de ropa en el centro de la ciudad ha sido condenado a seis años de prisión --y 180 euros de multa--, una vez devueltos los 1.927,35 euros que logró como botín. En realidad serían 14 años y medio, pero en aplicación del artículo 76,1 del Código Penal, lo que se conoce como el triple de la mayor, la condena se quedará en la mayor pena impuesta, dos años por seis de los asaltos, multiplicada por tres.

La petición inicial de la Fiscalía era del doble que la pena impuesta, 27 años --que por el mismo principio se hubiesen quedado en 12--, pero el hombre, Adrián Marín, alcanzó por medio de su letrada, Carmen Sánchez, el citado acuerdo.

El atracador confeso elegía preferentemente tiendas de ropa, a cuyas propietarias amenazaba con una navaja para llevarse la recaudación. En uno de los robos, el 16 de julio en la calle Madre Vedruna, la empleada resultó herida leve --con rasguños en el brazo-- al golpearse con la puerta para impedirle el paso. Otros de sus golpes, al día siguiente, lo impidió la propia dueña de la tienda. Pese a exhibir una navaja y amenazar con "rajarla", la mujer lo empujó hacia afuera advirtiéndole que tenía cámaras y que su marido la estaba esperando fuera.