Los problemas demográficos de la España interior serán analizados mañana, lunes, en Zaragoza por responsables de seis comunidades autónomas en el II Encuentro Interterritorial por el Cambio Demográfico, que presidirá la jefa del Ejecutivo aragonés, Luisa Fernanda Rudi.
En este encuentro participarán las comunidades de Aragón, Galicia, Asturias y Castilla y León, que ya firmaron una declaración institucional sobre demografía en la reunión que mantuvieron el pasado 28 de octubre en Oviedo, a las que mañana se unirán las de Extremadura y Castilla-La Mancha.
Dicha declaración institucional se fijaba como objetivos el reconocimiento por el Gobierno de España de la crisis demográfica de estos territorios, ha recordado el Ejecutivo aragonés en un comunicado.
También se apostaba por la búsqueda de soluciones conjuntas que pasen por el impulso de una Estrategia Española por el Cambio Demográfico que ofrezca alternativas a medio y largo plazo al declive de población y al envejecimiento.
Así como la revisión del modelo de financiación autonómica para que tengan un mayor peso y estén mejor ponderadas las variables demográficas como la baja densidad y la dispersión de la población y el envejecimiento.
Se trata según las mismas fuentes de factores que requieren un mayor coste de recursos para prestar los servicios esenciales (educación, sanidad, atención social y dependencia) a los ciudadanos de los territorios con estas características.
El establecimiento de medidas, por parte de la UE, para que en el nuevo marco de financiación de la Unión se otorgue prioridad a los proyectos para hacer frente a la crisis demográfica impulsados desde las regiones que forman parte de este grupo fue otro de los objetivos fijados en la reunión de Oviedo.
Una sesión de trabajo en la que las cuatro comunidades autónomas representadas reclamaron cambios en el sistema de financiación autonómica para que se tengan en cuenta factores como la despoblación, el envejecimiento o la dispersión.
Asimismo se decidió buscar financiación europea para proyectos de interés común de las autonomías que cuentan con una problemática demográfica similar.
Según el Gobierno de Aragón, los porcentajes de envejecimiento poblacional son superiores en la Comunidad aragonesa que en la media española.
Y es que el índice de sobreenvejecimiento es del 17,04 por ciento en Aragón, frente al 14,34 por ciento de España.
Eso significa que en la Comunidad aragonesa existe una mayor dependencia de los servicios públicos esenciales, lo que incrementa su coste, han agregado las mismas fuentes.
La densidad media aragonesa es de 28,3 habitantes por kilómetro cuadrado, es decir, 3,3 veces inferior a la española. La cifra de Aragón está muy cercana a lo que se considera despoblación (por debajo de los 25 habitantes por kilómetro cuadrado).
Solo cinco comarcas superan la densidad media y solo siete superan los 25 habitantes por kilómetro cuadrado, mientras que el resto se sitúa por debajo de este límite, estando 13 de ellas en lo que se considera desierto demográfico (10 habitantes por kilómetro cuadrado, límite por debajo del cual se sitúa toda la provincia de Teruel.
La población aragonesa reside en 731 municipios pero, dado que en la capital vive el 50,4 por ciento de la misma, la población media del resto de municipios es 918 habitantes.
Algo que proporciona una primera característica: la dispersión de una población escasa en un amplio territorio (el 49,6 por ciento de la población ocupa el 98 por ciento del territorio).
Esto arroja una densidad muy baja de 28,3 habitantes por kilómetro cuadrado, que se convierten en 14,3 excluyendo Zaragoza capital.
En este sentido, el consejero de Política Territorial, Antonio Suárez, ha vuelto a defender que "el sistema de financiación autonómica actual, vigente desde 2009, perjudicó a Aragón con respecto al de 2001".
Así, el sistema de 2001 asignaba el 94 por ciento del fondo en función de la población, cifra que subió hasta el 97 por ciento con el sistema de 2009.
También la superficie está peor tratada en el sistema vigente que en el anterior, ya que con el sistema de 2001 se otorgaba el 4,2 por ciento del fondo en función de la superficie, porcentaje que se redujo hasta el 1,8 por ciento en el año 2009.
Finalmente, con respecto a la dispersión poblacional, el Gobierno de Aragón señala que hay que tener en cuenta que en 2001 se adjudicaba el 1,2 por ciento del fondo en función a este criterio, mientras que en 2009 pasó a suponer sólo el 0,6 por ciento.
