No van contra nadie, ni quieren abrir una guerra con otras autonomías. Menos aún si se tiene en cuenta que todas, salvo una, están gobernadas por el PP. Pero seis comunidades, entre ellas Aragón, se han unido para sumar fuerzas en la negociación del nuevo modelo de financiación. Quieren que sus denominadores comunes --amplio territorio, densidad de población, dispersión y envejecimiento-- tengan más peso en el reparto de los fondos procedentes del Estado. Ahora solo suponen el 3% y quieren que llegue al 10% como mínimo. En al actual sistema, el 97% se distribuye en función del número de habitantes.

Los consejeros de Hacienda de las seis comunidades, Aragón, Asturias, Castilla y León, Extremadura, Galicia y La Rioja se reunieron ayer en Zaragoza para poner en común un documento marco, que guiará sus reivindicaciones en el proceso de negociación con el Gobierno central y el resto de autonomías. Una declaración de intenciones que en realidad lo único que hace es desgranar sus características singulares: poca población, dispersa y envejecida en un territorio amplio, para asegurar que estas condiciones encarecen la prestación de los servicios y que por ello necesitan más dinero en el reparto de que derive del nuevo modelo de financiación. Coinciden que las intenciones de los consejeros de Política Territorial, que también se reunieron esta semana en Zaragoza, aunque estaba Castilla-La Mancha.

No entran en porcentajes. Pero ayer, en una rueda de prensa conjunta, el consejero de Hacienda de Extremadura, Antonio Fernández, se mojó --fue el único-- y apostó por incrementar hasta, el 10% el peso de las variables que les benefician. En el anterior sistema, previo al actual, que diseñó el Gobierno de José María Aznar, era del 6%. El resto de sus homólogos fue más cauto. El aragonés, José Luis Saz, evitó cualquier atisbo de reivindicación que pudiese sonar a confrontación. Se limitó a decir que es necesario evitar "distorsiones" y rechazó, como ya había hecho en otras ocasiones, que el único criterio que se tenga en cuenta sea el de la población.

Las seis comunidades insistieron en que juntas suman el 45% del territorio nacional, pero que, en cambio, solo cuentan con el 19% de la población.