El responsable de Personal del Ayuntamiento de Zaragoza, Alberto Cubero, puso ayer de manifiesto que la principal afección que tendrá la prórroga presupuestaria en su área será las complicaciones para «cumplir la ley» que tiene no disponer de los «cinco o seis millones de euros adicionales» que cuesta aplicar la subida salarial del 2,5% ordenada por el Gobierno central para los funcionarios.

Sin las cuentas aprobadas, explicó, se repite la cuantía que el ejercicio anterior había para las retribuciones y falta ese dinero, que sí incluía el borrador de presupuesto que presentó Zaragoza en Común (ZeC) en diciembre. Así que se tendrá que acudir a una modificación de créditos con la que detraer esa cifra del gasto obligatorio, de lo consignado para los servicios públicos.

Mientras, el responsable de Economía, Fernando Rivarés, se mostró «harto» de las estrategias «partidistas» del PSOE, y aseguró que lanzará el presupuesto el día 31, con las aportaciones de CHA, ya que el PSOE se niega a hablar.