El Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León (TSJCyL) ha estimado parcialmente el recurso interpuesto por la comunidad de Aragón contra una resolución del Gobierno castellanoleonés y reduce el tamaño legal de la explotación minera de Borobia (Soria) en casi dos tercios, de 480 a 180 hectáreas, con declaración favorable de impacto ambiental.

La citada sala, según la sentencia facilitada por el gabinete de comunicación del TSJCyL, ha anulado en la resolución dictada por la Junta en junio del 2013 el extremo relativo a la extensión de la concesión, cifrado en una «superficie de 16 cuadrículas mineras», por no ser conforme a derecho.

En su lugar, ha dejado reducida la concesión directa de la explotación para recursos de magnesita a la «superficie de las seis cuadrículas mineras a que se refiere la declaración de impacto ambiental (DIA)».

La sala ha tomado esta decisión porque el proyecto de concesión minera está sujeto a una declaración de impacto y ese trámite no se realizó sobre las 16 cuadrículas mineras sino sobre seis.

La Junta puede recurrir en el plazo de un mes esta sentencia en casación ante la Sala de lo Contencioso-Administrativo del Tribunal Supremo o ante la Sección de Casación de la Sala de lo Contencioso-Administrativo, con sede en el Tribunal Superior de Justicia de Castilla y León.

La sala concluye que la situación creada, entre lo autorizado y lo que tiene licencia ambiental, es una incongruencia y una contradicción.

La mina de Borobia se halla junto a la frontera de Aragón, lindando con la comarca de Calatayud, por la que discurre el río Manubles. Este cauce fluvial nace en la sierra de Tablada, en Soria, y podría contaminarse.