Los sindictados agrarios aragoneses consideran que las medidas para afrontar la campaña de la fruta que se han anunciado todavía no cubren todas las necesidades de las explotaciones. Por eso quieren esperar a conocer en detalle la propuesta y que se aclaren algunos de los conceptos.
El responsable de UAGA en la comunidad, José María Alcubierre, manifestó que si no se mejora la propuesta con alguna de sus reivindicaciones (como la de poder contratar a personas afectas por ERTES o facilitar la movilidad entre municipios) la campaña quedará terriblemente tocada. «Tras seis años de crisis no nos podemos permitir perder toda la producción», indicó. Por el momento confían en la voluntad de diálogo que ha mostrado la administración estatal. Y hoy mismo están citados a una reunión con la Delegación del Gobierno.
«La sensibilidad a la negociación la vemos, lo que no vemos son soluciones», manifestó el responsable de Asaja, Ángel Samper. Considera que con la limitación de la movilidad solo se podrá cubrir un porcentaje «muy bajo» de la mano de obra que se necesita, calculada en unos 20.000 temporeros. Según algunos cálculos en estos momentos solo está asegurado el 25% de esa cantidad.
«Están ofreciendo soluciones ordinarias ante un problema extraordinario», lamentó Samper. Desde la entidad temen que la fruta acabe en el suelo empeorando la imagen del sector a pesar de que se consideran esenciales en este periodo de estado de alarma.
