Los sindicatos UGT, CCOO y CSI-CSIF están decididos a reabrir cuanto antes el debate sobre la implantación de la semana laboral de 35 horas en la Administración autonómica. Estas tres centrales sindicales, que representan según sus cálculos al 80% de los trabajadores de la Diputación General de Aragón, están a punto de cerrar una propuesta conjunta de negociación con el Gobierno PSOE-PAR con tres ejes principales: el incremento salarial para el 2005, la reordenación del tiempo de trabajo del personal público y la carrera administrativa.

Gobierno aragonés y sindicatos volverán en las próximas semanas a la mesa de negociación tras un largo periodo de tanteo y contactos informales. El primer caballo de batalla de la negociación se centrará en concretar el incremento que experimentarán los salarios de los cerca de 40.000 empleados públicos. A nivel del Estado la subida pactada es del 3,5% para los funcionarios.

TENSIONES NEGOCIADORAS Pero será la discusión del tiempo de trabajo la que generará mayores tensiones, ya que unos y otros están a años luz en sus posiciones en lo que respecta, especialmente, a la jornada laboral de 35 horas. En este nuevo proceso negociador, los sindicatos quieren reactivar el debate de la reducción de jornada, una medida que de aplicarse tendrá un elevado coste económico en el caso del personal sanitario, según cálculos de la propia Administración. Los sindicatos han remitido ya sus respectivas propuestas de reducción de jornada al director general de la Función Pública, Luis Roldán, y están a la espera de una respuesta.

El otro eje de discusión en la mesa de negociación será el modelo de la carrera administrativa del personal funcionario, otra vieja aspiración de los sindicatos.

SEPTIMO CONVENIO Para la última fase, según el calendario pactado en enero pasado por ambas partes, el Gobierno aragonés y los sindicatos afrontarán la negociación del VII convenio colectivo, puesto que el anterior se ha quedado totalmente obsoleto y caduco.