Zaragoza Los vecinos de la zaragozana avenida de César Augusto se vieron ayer por la manaña sorprendidos al ver un vehículo que había aparcado en la fuente situada junto a la escultura del emperador romano, tal y como se aprecia en la fotografía. Muchos de los curiosos que se acercaron hasta allí no podían evitar preguntarse cómo había hecho el conductor de ese coche para empotrarse de esa manera en la fuente, que está situada en las inmediaciones de las murallas romanas. Alguno de los testigos del suceso no desaprovecharon la ocasión y alguno de ellos llegaron a fotografiar incluso la insólita imagen.