La Federación Estatal de SOS Racismo, de la que forma parte SOS Racismo Aragón, ha detectado discriminación por motivos étnicos en el acceso a un 37 por ciento de los locales de ocio nocturno que han visitado durante el pasado fin de semana en cinco ciudades españolas, entre ellas Zaragoza.

Con esas visitas, llevadas a cabo durante la noche del sábado día 7 al domingo 8 de junio, SOS Racismo ha pretendido "dejar constancia de la existencia de comportamientos racistas y discriminatorios en el acceso a locales de ocio nocturno", ha informado la entidad en un comunicado.

La prueba se realizó de manera simultánea en cinco ciudades del Estado español -Zaragoza, La Coruña, Donostia, Barcelona y Madrid- y se enmarca en un proyecto de la Federación Estatal de SOS Racismo subvencionado por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social dentro de los programas cofinanciados por el Fondo Europeo para la Integración.

En todas las ciudades los participantes se agruparon en cuatro parejas de hombres de diferentes grupos étnicos -una de chicos latinos, una de subsaharianos, otra de magrebíes, y, en el caso de Zaragoza y de Barcelona, también una de chicos gitanos.

Además, en todos los lugares había un grupo de control formado por dos hombres autóctonos.

Todos los participantes estaban en un mismo rango de edad de entre 25 y 35 años e iban vestidos de manera similar.

De este modo, la diferencia de trato entre unas parejas y otras solamente puede explicarse, a priori, por los rasgos físicos que caracterizan a cada uno de los grupos.

Este tipo de acciones, denominadas "testing", son según SOS Racismo de Aragón uno de los mejores métodos para demostrar la discriminación que se ejerce en determinados contextos.

En un 37 por ciento de los locales a los que se ha intentado acceder se han producido denegaciones de entrada u otras diferencias de trato, con excusas como la "existencia" de una fiesta privada que no era tal o el pago de una entrada que no se exigió a la pareja de control.

En el caso concreto de Zaragoza, el "testing" se ha realizado en nueve bares de diferentes zonas típicas de ocio nocturno de la capital aragonesa.

Con esta prueba, tanto la Federación Estatal como SOS Racismo Aragón en particular señalan que pretenden "contribuir a que los diferentes territorios sean más acogedores y abiertos".