El portavoz del PP en el Ayuntamiento de Zaragoza, Eloy Suárez, ha mostrado hoy su satisfacción con la sentencia que anula la condición que impuso el consistorio para la cesión de una parcela para equipamiento docente en Valdespartera y ha pedido al Gobierno de la ciudad que no la recurra.
En un comunicado, Suárez ha recordado que un juzgado de lo Contencioso-Administrativo de Zaragoza ha anulado la condición que el tripartito de izquierdas impuso de no construir un colegio concertado en el acuerdo de cesión al Gobierno de Aragón de una parcela para equipamiento docente en Valdespartera.
Por lo que el portavoz popular ha reclamado que el Gobierno municipal socialista no recurra esa sentencia y que aproveche así "la oportunidad de resolver el problema de equipamientos educativos en el sur de Zaragoza", al mismo tiempo que se capta una inversión millonaria, de 16 millones de euros y 200 puestos de trabajo.
Según Suárez, la sentencia "tumba la decisión sectaria del tripartito" de condicionar la cesión de una parcela municipal en Valdespartera a que no se construya en ella un colegio concertado.
En este sentido, ha destacado que los argumentos jurídicos recogidos en el fallo "son plenamente coincidentes" con los que el Partido Popular ha mantenido para denunciar ese "condicionamiento de carácter sectario".
Ya que en concreto, ha agregado, el juez estima que se trata de una condición ilegal, que contraviene la Ley Orgánica de Educación, y que restringe la prestación del servicio público educativo, que se realiza a través tanto de centros púbicos como de centros privados concertados.
El portavoz popular ha considerado que la sentencia es "una excelente oportunidad para dar luz verde a una inversión de 16 millones de euros y 200 puestos de trabajo".
Por lo que exige al responsable del Urbanismo municipal, Carlos Pérez Anadón, que no la recurra y "no ponga más impedimentos a la llegada de un proyecto educativo que ayudará a resolver el problema de equipamientos docentes y deportivos en el sur de Zaragoza".
Suárez le pide al también candidato socialista a la alcaldía de la capital aragonesa que "abandone la línea de radicalidad marcada por Chunta e IU en el seno del tripartito y demuestre que está dispuesto a abandonar estrategias electoralistas para alcanzar grandes pactos de ciudad con el objetivo de resolver las necesidades de los ciudadanos de Zaragoza".
