En Aragón, desde el 2010, se complementa el coste salarial (del 50% del sueldo mínimo) con una ayuda complementaria que se reparte a final de año entre todos los centros especiales de empleo. La DGA, en el ejercicio del 2019, contará con un presupuesto prorrogado cuyo compromiso es mantener la dotación, pese a la incertidumbre de la subida del salario mínimo interprofesional que supuso un 22%, es decir, a la administración le cuesta 2,5 millones de euros más. Por ello, Recaredo García, jefe de servicio de promoción de empleo del Inaem, en la presentación del informe, manifestó que «se está trabajando para que se frecuente más dotación en el reparto de estos programas, así como un reajuste y previsión a corto y medio plazo de los presupuesos». R.I.