El Gobierno PP-Cs confirmó ayer en el pleno del Ayuntamiento de Zaragoza que no dará marcha atrás en la supresión de trece cursos de formación del instituto municipal del Imefez que se ofrecen cada año a parados de larga duración. La decisión ya estaba tomada, no ha sido consultada con los partidos y ni siquiera se ha comunicado a la representación empresarial ni al resto de miembros del patronato, al que la actual gerente, Rosa Plantagenet, ni siquiera ha reunido. Pero la tensión es máxima porque, como denunciaron ayer los profesores del Imefez en el salón de plenos, se sienten «insultados» por ella, al acusarles de querer entrar en la Administración «por la gatera. Exigieron una disculpa que tampoco se va a producir.

La responsable municipal de Economía, Carmen Herrarte, defendió que lo que Plantagenet dijo públicamente en la Comisión de Hacienda sobre este tema, en realidad «no inculpaba a los trabajadores» que, en su opinión, son los que «están sufriendo la nefasta gestión» de gobiernos anteriores, solo por pretender ampliar los meses de contratación de este personal desde el mínimo de nueve meses a diez, once o los doce de todo el año. Y achacó la polémica suscitada a la «habilidad de la extrema izquierda y el sanchismo para que parezca lo que no es».

UN RECORTE

Eso es lo que PSOE, ZeC y Podemos-Equo, que presentaron de forma conjunta esta moción para denunciar la situación en el Imefez, consideran que se ha aplicado en el patronato, una decisión que ahorra «3.000 o 4.000 cochinos euros», dijo Alberto Cubero, de ZeC, y deja sin curso a unos 200 ciudadanos que se encontrarían en el paro y a los que se les podría dar una oportunidad de encontrar trabajo.

«Los recortes sociales del señor Azcón ya están aquí», destacó el socialista Luis Miguel García Vinuesa, que lamentó que lo haga «con los más vulnerables» y haya «generado un problema donde no lo había», perpetrado por un miembro del PP en un área que es «una concejalía de Cs». Mientras, Amparo Bella, de Podemos-Equo, al igual que ellos dos, recalcó que las cuentas del Imefez están saneadas y el pasado jueves se movieron sus más de 700.000 euros de remanente para pagar amortizaciones de deuda bancaria. O sea, que no es por falta de dinero en sus arcas.