La nueva tarjeta única que el Ayuntamiento de Zaragoza comenzará a repartir en pruebas a finales del mes que viene para los usuarios de transporte público no empadronados superará en prestaciones a la actual tarjeta ciudadana para los zaragozanos, lo que obligará a que esta se actualice y supere en ventajas a su competidora. La concejala de Movilidad del consistorio, Teresa Artigas, confirmó ayer que los empadronados podrán gozar de más ventajas, aunque estas están aún «por perfilar».

La edila, que acompañó al alcalde Pedro Santisteve a los actos de la Semana de la Movilidad celebrados ayer en la avenida Cesáreo Alierta, explicó a este diario que el proyecto de esta tarjeta única que, como publicó EL PERIÓDICO, se lanzará en pruebas con unas 10.000 unidades, corresponde a una «hoja de ruta» que lleva «meses» planificándose, y se lanzará en dos modalidades, una nominal, asociada a un usuario y otra anónima. De forma similar a lo que sucede con la actual tarjeta bus, que está llamada a desaparecer con la evolución del modelo.

VENTAJAS / Entre las nuevas potencialidades de la tarjeta ciudadana estará incorporar los abonos de transporte, mensuales, trimestrales o anuales, al mismo soporte, las según fuentes de Movilidad consultadas.

Así, ambas tarjetas municipales permitirían incorporar en un solo documento todos los abonos y sistemas de pago que permiten moverse por Zaragoza a diario, desde el autobús y el tranvía, pasando por el Cercanías -aunque con este los transbordos serían bonificados, no gratuitos-, el servicio Bizi, la zona azul o los aparcamientos disuasorios en los extremos de la línea 1 del tranvía.

Como publicó este diario, la nueva tarjeta para no empadronados, aún por bautizar, se lanzará a finales de octubre o principios de noviembre con una primera remesa de 10.000 unidades, que se destinarán a algunos de los colectivos más numerosos de entre los que se mueven a diario por la capital sin ser vecinos. Así, entre 5.000 y 6.000 de ellas serían para estudiantes, otras 2.000 ó 3.000 para vecinos de Utebo y el resto para otro tipo de público, aún por determinar.

Si la conexión en los pagos de los distintos servicios y redes de transporte funcionan, tras un mínimo de tres meses de pruebas, a lo largo del año que viene se distribuirían 200.000 unidades más. Los detalles, confirmaron fuentes municipales, serán presentados próximamente y es de preveer que junto al proyecto de mejora de la tarjeta ciudadana, a la que se quiere seguir dando primacía para fomentar el empadronamiento.

Las mismas fuentes se felicitaron de que este proyecto de intermodalidad esté por fin a las puertas de ver la luz, con las ventajas que conllevará a los usuarios. No solo por la comodidad de reducir el número de tarjetas en su cartera, sino por la multiplicación de los puntos de recarga -los del ayuntamiento, de Avanza, del tranvía, del Consorcio de Transportes o los parquímetros- o la posibilidad de aplicaciones móviles de consulta de gasto.