Técnicos de Red Eléctrica Española se desplazaron ayer al valle de Bujaruelo en previsión de cualquier problema que pudiera surgir en caso de que estallara la supuesta bomba colocada por ETA. Fuentes de la compañía aseguraron a este periódico que cuenta con mecanismos alternativos para el suministro eléctrico en caso de complicaciones y que no fue necesario cortar el fluido, a diferencia de lo que sí ocurrió en Behobia (Guipúzcoa), donde se tomó esta medida de forma temporal para evitar más riesgos hasta que se completó la explosión controlada. En concreto, las torres de alta tensión que cruzan el valle de Bujaruelo estaban ayer "en perfecto estado", según las fuentes consultadas. La línea recorre el trayecto entre Biescas y Francia y es doble, es decir, sirve para exportar e importar electricidad con el país vecino.

Sin embargo, durante algunos momentos se temió por que se hubiera producido la explosión y que ésta hubiera sido la causa del apagón que dejó ayer a Jaca sin luz. La avería se produjo en una subestación eléctrica.