Según la previsión del Gobierno aragonés, la futura radiotelevisión autonómica contará con tecnología digital --que será obligatoria dentro de pocos años-- pero sus emisiones serán analógicas. Este modelo pretende garantizar que tele llegue al máximo número posible de hogares aragoneses, pues muchos de ellos no están preparados para los sistemas digitales.El ente será de titularidad pública, porque la propia legislación aragonesa impide que fórmulas mixtas en la propiedad del organismo. Sin embargo, sí habrá participación privada en la difusión de programas, puesto que se contratarán los espacios de emisión que no sean de producción propia.El impulso a la radiotelevisión autonómica ha sido posible porque a finales del año pasado, y por primera vez en los últimos diez años, todos los partidos de las Cortes se mostraron de acuerdo en negociar su puesta en marcha. La falta de consenso --para elegir el consejo de administración hace falta el sí

de dos tercios de las Cortes de Aragón-- ha impedido hasta la fecha la creación del ente público. Mientras tanto, han proliferado las televisiones locales.