El teléfono contra el acoso escolar que el Gobierno de Aragón puso en marcha en mayo del año pasado —el primero creado en España y gestionado desde un Departamento de Educación— ha detectado 56 supuestos casos de acoso en las aulas. La consejería y su asesoría de convivencia están actualmente estudiando las diferentes situaciones.

Según informó ayer Educación, desde la puesta en marcha de este servicio (900 100 456) se han recibido 335 llamadas de diverso tipo. La mayoría de ellas eran de personas (familias, alumnos o docentes) que buscaban información sobre el tema en cuestión o sobre los procedimientos que se siguen. Se trata de un servicio que está operativo 24 horas, los 365 días del año y que se dirige a los menores que vivan una situación de acoso o que sean conocedores de ella. Además, ofrece atención personalizada, psicológica e integral.

Dentro del plan de la DGA se está trabajando en la actualización de los protocolos de actuación, ya que los que permanecían vigentes «datan de hace una década y no responden a toda la realidad que se vive en los centros aragoneses», según Educación.

Por otro lado, también se quiere abordar la cuestión normativa, ya que la actual no contempla el concepto de acoso específicamente, sino que se engloba dentro de las conductas graves de convivencia en general. Esto impide tener datos específicos sobre estas situaciones. Una de las novedades ya implantada es la figura del observador. En este sentido, se están potenciando las comisiones de convivencia de los centros con la incorporación de los servicios de orientación y se resalta el papel de familias y alumnos.