El grupo Tereos (antigua Campo Ebro), dedicado a la producción de almidón, glucosa y dextrosa a partir del maíz, invertirá en torno a 10 millones de euros en la construcción en Villanueva de Gállego de un almacén logístico. La compañía adquirió el pasado año un terreno de 20.000 metros cuadrados en ese municipio, donde ubicará este centro asociado a la fábrica que tiene en el barrio zaragozano del Picarral. Las nuevas instalaciones, para las que no hay fecha de obras, servirán para el aprovisionamiento de materia prima y el almacenamiento de producto terminado.

«Los requisitos de calidad del maíz han ido evolucionando y las instalaciones que tenemos actualmente en Figueruealas se han quedado obsoletas», ha explicado este lunes Javier Pemán, director general de la fábrica, con motivo de la visita a la planta del consejero de Agricultura, Joaquín Olona.

Este desembolso es adicional a los 25 millones que este grupo cooperativo francés está invirtiendo en la factoría para elevar un 25% la capacidad de molturación de maíz, un proyecto iniciado en el 2018 que se culminará este año. La ampliación responde al incremento de la demanda, sobre todo del sector del papel y el cartón, que ya supone el 50% de la producción, siendo la aragonesa Saica uno de sus principales clientes. Le sigue la industria alimentaria, con el 35%.

NUEVOS MERCADOS

También ha experimentado un notable crecimiento en nuevos mercados, como el farmacéutico, en la que se introdujo en el 2013. Y desde hace un año ha puesto en marcha una línea de glucosa de bajos contenidos en azúcares, una novedad con la que trata de adaptarse a las tendencias de consumo. La fábrica trabaja además en «proyectos estratégicos» que darán lugar a nuevas gamas. En paralelo, la plantilla ha crecido en 100 puestos en los últimos ocho año y suma ya 190 trabajadores.

El incremento de la demanda ha llevado a la planta a cifras récord de producción, con la previsión de llegar a 400.000 toneladas de maíz procesadas en el año fiscal que acabará en marzo, lo que equivale a la mitad de la producción de este cereal en Aragón.

En concreto, el 40% del maíz que consume la planta proviene de la comunidad, que no cubre la mayor parte de la materia prima que demanda por el fuerte presencia del cultivo transgénico en este territorio, algo incompatible con los sectores a los que la fábrica destina gran parte de la producción. Aunque Francia sigue siendo su principal proveedor, el peso local ha crecido en unas 30.000 toneladas en el último año.

Javier Pemán descartó un posible traslado de la producción a Villanueva, donde se ubicará al almácen. «Es inviable», ha zanjado el directivo aludiendo a razones de espacio y operativas. El consejero Olona, por su parte, ensalzó a Tereos e instó al sector cooperativo aragonés a seguir su ejemplo para «ganar tamaño sin complejos».