La Dirección General de Gestión Forestal del Gobierno aragonés ha dado por finalizadas las obras de reparación y reconstrucción de las redes antialudes instaladas en el barranco de Estiviellas para proteger el núcleo habitado de Canfranc Estación, en el Pirineo de Huesca.

Según informa el Ejecutivo autónomo, los trabajos, que han contado con un presupuesto de 78.000 euros, han permitido recuperar la funcionalidad de cuatro de las catorce líneas de redes antialudes existentes en el barranco, donde existen pendientes que alcanzan los 63 grados de inclinación.

La decisión de llevar a cabo las reparaciones se adoptó tras una inspección en la zona que permitió detectar los daños sufridos en una parte de las redes debido al impacto de rocas arrastradas.

Las fuentes citadas aseguran que las características topográficas y climatológicas del propio barranco de Estiviellas han dado lugar históricamente a fenómenos de aludes que han afectado tanto a la población como a las vías de comunicación.

Para el director general de Gestión Forestal, Roque Vicente, se trata de "una actuación de prevención ineludible frente a posibles circunstancias de la naturaleza que puedan afectar a un núcleo habitado como es Canfranc".