Los acabados generales de la terminal ferroviaria siguen sin tener fecha pese a las numerosas quejas y a que se necesitarán dos años para hacerlos realidad. Los actuales gestores del GIF, la sociedad estatal del AVE, se comprometieron el pasado mes de mayo a ejecutar los trabajos, pero nada se sabe a estas alturas del año. Entre las obras pendientes figuran las mejoras en el sistema de climatización y extracción de humos y en la iluminación, la conclusión de cerramientos y el arreglo del pavimento. También se debe instalar todavía un ascensor para comunicar el aparcamiento y el vestíbulo y evitar así los cuestionados trasiegos por todo el edificio.