Toda la operación se desarrolló a los ojos de los vecinos de la avenida Sagunto que se encontraban en la calle en ese momento. Los policías detuvieron a los cuatro delincuentes ante la mirada de los clientes del bar Europa, que se encontraban en la terraza en el momento de los arrestos. De hecho, la mayoría de los testigos presenciales corrió rápidamente a esconderse dentro del establecimiento. El propietario, al no saber con certeza qué estaba sucediendo, bajó la persiana del local por seguridad y todos permanecieron en el interior del bar. En ese mismo momento, los agentes de la Policía introdujeron en los coches a los detenidos y los llevaron hasta el puesto de mando. También fue llevado hasta allí el vehículo en el que viajaban los cuatro arrestados, interceptado por los agentes.