Organizaciones sindicales (CC.OO Industria y UGT FICA), la patronal del sector de estaciones de servicio (Aesar), organizaciones de consumidores y usuarios (UCA Aragón y Actora) y la asociación de discapacitados Cocemfe se han unido en contra de las gasolineras que no cuentan con personal.

En una reunión que han mantenido todas las partes hoy con el Gobierno de Aragón, han trasladado su preocupación por estas estaciones de servicio, a las que han denominado como "fantasma" y han exigido una nueva normativa que les impide operar, como ocurría hasta 2016, cuando fue derogada la obligatoriedad de que contaran con, al menos, una persona al cargo.

De dicho encuentro solo han sacado el compromiso del director general de Industria de volver a reunirse en un ámbito más amplio, ya que atañe también al área de consumo, ante lo que han lamentado que ni la consejera de Economía, Industria y Empleo, Marta Gastón, ni la de Ciudadanía y Derechos Sociales, María Victoria Broto, hayan hecho "un pequeño hueco" para escucharles.

El responsable de Industria de CC.OO Aragón, Carlos Guerrero, ha incidido en tres aspectos: la importante pérdida de puestos de trabajo en el sector por la competencia "desleal" de estas nuevas estaciones, que no prestan los mismos servicios; los riesgos en materia de seguridad y contaminación, y la imposibilidad de que consumidores y usuarios puedan ejercer sus derechos, algo que afecta en mayor medida a aquellos que tienen algún tipo de discapacidad.

Se oponen, por tanto, a la existencia de estas estaciones de servicio desatendidas y reclaman que el Gobierno autonómico cuente con su participación a la hora de redactar una nueva normativa o volver a la anterior.

Asimismo, todos los comparecientes han puesto en valor que seis asociaciones que defienden intereses distintos se hayan puesto de acuerdo para defender un bien común.

Guerrero ha recalcado que no plantean que siempre haya personal suministrando carburante, sino que simplemente haya como mínimo un trabajador a cargo del conjunto de la instalación mientras esta esté abierta al público.

Así, ha instado al Gobierno PSOE-CHA a decidir si quiere apostar por un "modelo social" o por el "modelo liberal de barra libre".

Por su parte, la presidenta de la Asociación de Estaciones de Servicio de Aragón (Aesar), Pilar Soto, ha alertado de que en toda España el número de gasolineras se ha incrementado de 10.310 a 11.188 entre 2011 y 2016, mientras que en lugar de crear empleo se han destruido 2.700 puestos de trabajo, algo que tiende a crecer.

Ello significa, a su juicio, que las nuevas estaciones son "fantasma" y que el resto se ven obligadas al cierre o a amortizar algún puesto de trabajo porque no pueden competir.

"Competir es bueno, pero hay que competir siempre en igualdad de condiciones", ha insistido, a la vez que ha recordado que "las leyes son para todos y que la Administración "no puede hacer oídos sordos" a esta reclamación generalizada.

Por ejemplo, ha relatado que, si un consumidor quiere que se verifique si se le ha suministrado el combustible correctamente, tiene derecho a ello, algo que en una estación sin personal no se puede llevar a cabo, y lo mismo sucede en lo respectivo a la seguridad, las inspecciones de oficio, que ya no pueden ser "por sorpresa" o a la hora de atender a una persona con discapacidad.

Ha reivindicado que las estaciones de servicio crean más de 1.300 puestos directos en todo Aragón, a los que habría que sumar los indirectos, que son pequeños empresarios, aunque lleven la imagen de una petrolera.

En Castilla-La Mancha, Castilla y León, Extremadura, Cantabria y la Región de Murcia hay, como había en Aragón hasta febrero de 2016, una normativa que exige que haya al menos una persona a cargo de las instalaciones, mientras que la peor situación se da en Cataluña, con un incremento "exagerado" de las estaciones "fantasma" hasta el punto de que en la provincia de Lleida superan a las convencionales.

El secretario general de la Federación de Industria, Construcción y Agro de UGT Aragón (UGT-FICA), José Juan Arceiz, ha denunciado las malas prácticas de estas nuevas estaciones y ha asegurado que no van a permitir empresas sin trabajadores, porque está en riesgo "todo el sector".

En representación de la Confederación Española de Personas con Discapacidad Física y Orgánica (Cocemfe), Marta Valencia ha expresado su preocupación con la proliferación de las estaciones desatendidas, ya que para ellos los coches son sus "piernas", por lo que estas instalaciones minan su autonomía personal y vulneran su derecho de acceder a los servicios en igualdad de condiciones.

La presidenta de la Asociación de Consumidores Torre Ramona (Actora), Lucía Germani, ha criticado que la Administración sea la única que falta en este frente común y el secretario general de la Unión de Consumidores de Aragón (UCA), José Ángel Oliván, ha alertado de que si las estaciones no atendidas no ven truncado su desarrollo caminamos hacia un modelo en el que solo existan este tipo de instalaciones.