El símbolo de Teruel, el Torico, ya luce el pañuelo rojo tras el multitudinario acto en el que dos representantes de la peña El Ajo, Daniel Igual y Mario Bea, lo han colocado gracias a una torre humana y en una plaza abarrotada de peñistas y visitantes.

La Puesta del Pañuelo y el Toque del Campanico han marcado este sábado el inicio de las fiestas de La Vaquilla 2019.

Estos dos miembros de la peña El Ajo, que este año celebra el 50 aniversario de su primera fundación, han sido los elegidos por sus compañeros de la actual directiva y de directivas de los últimos diez años de la peña para tener el honor de escalar la columna sobre la que se asienta el Torico y colocar el pañuelo a la estatua del animal.

Un honor que cada año tiene una peña de las 21 de la ciudad, que congregan a unos 9.700 peñistas, y que se celebra por todo lo alto con una plaza abarrotada a la espera del momento festivo.

Antes, en la plaza del Ayuntamiento el nombrado Vaquillero del Año, José Martín Marsal, ha sido el encargado de tirar de la cuerda que hace sonar el campanico que corona el edificio del Ayuntamiento.

Lo ha hecho después de que la alcaldesa de la ciudad, Emma Buj, llamara a los turolenses desde el balcón de la Casa Consistorial a disfrutar de esta fiesta.

Este es el acto tradicional del inicio de las fiestas y tras él los peñistas se trasladaban a la plaza del Torico para poner el pañuelo, aunque con los años este último ha cobrado más trascendencia y es el que congrega a más gente, especialmente turistas que no quieren perderse la emoción del momento, a pesar del intenso calor.

Así y todo, en esta ocasión han sido muchos los que han elegido la plaza del Ayuntamiento y este primer acto oficial para comenzar la fiesta, aprovechando también que podía seguirse la Puesta del Pañuelico a través de una pantalla gigante colocada para la ocasión.

Otros dos peñistas de El Ajo han llevado el pañuelo desde el Ayuntamiento hasta los pies de la columna que sostiene el Torico y, allí, Daniel Igual y Mario Bea han subido hasta lo más alto, gracias a una torre humana formada por hasta una cuarentena de compañeros de la peña.

La nota personal que han querido dejar este año han sido unos ajos a los pies de la escultura, recordando el nombre de la peña que, como ellos cuentan, se fundó por primera vez hace medio siglo para "darle picante a La Vaquilla".

Al bajar han recibido el abrazo emocionado de sus compañeros de peña, unas cuarenta personas entre responsables de distintas directivas de la asociación y colaboradores.

Tras una semana de actos dentro de las Fiestas del Ángel, desde hoy Teruel celebra La Vaquilla hasta el próximo lunes cuando al llegar la medianoche, otros dos miembros de la peña El Ajo, Imanol Pérez y Javier Cantalapiedra, serán los encargados de retirar el pañuelo al Torico y despedir así las fiestas.