Los trabajadores de TUZSA, la concesionaria del autobús urbano de Zaragoza, no quieren llevar a cabo paros parciales este verano como ha propuesto el comité de empresa. Así lo dejaron ver en la asamblea celebrada ayer en la capital aragonesa, en la que expresaron mayoritariamente que si bien están de acuerdo con los motivos de la convocatoria, no consideran que éstas sean fechas apropiadas para una huelga.

El comité de empresa propuso a la asamblea un calendario de catorce días de paros parciales en julio y agosto en protesta por la reducción de la flota durante el verano y por el recorte de los tiempos de los recorridos. Pero los trabajadores no se mostraron ayer partidarios de esta medida en estas fechas y consideraron que sería más oportuno esperar a que acaben las fechas estivales, según fuentes del CUT (Colectivo Unitarios de Trabajadores).

Las mismas fuentes garantizaron que la postura de los empleados ha dividido al comité de empresa, puesto que mientras UGT, CCOO y CSIF serían partidarios de mantener los paros, el CUT preferiría hacer caso a la asamblea y no convocarlos.

El próximo lunes se conocerán más detalles de la nueva polémica abierta con el bus urbano, pues el comité y la empresa se verán las caras en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA) para intentar conciliar posturas. Ese mismo día habrá un referéndum entre los trabajadores. Los paros propuestos afectarían a seis días de julio y ocho de agosto, de cinco de la madrugada a ocho de la mañana y de ocho de la tarde a once de la noche.