Los trabajadores de Schindler saldrán a la calle este lunes, 10 de febrero, en contra del cierre de la unidad de producción de componentes de ascensores del Polígono Empresarium. En concreto, han convocado una concentración a las 19.00 horas en la plaza de España de Zaragoza.
Antes de esta protesta, los representantes sindicales mantendrán una reunión con la dirección de la empresa en el Servicio Aragonés de Mediación y Arbitraje (SAMA), encuentro de conciliación previo a la celebración de los paros parciales y totales que ha convocado la parte social para los días 12, 13, 19 y 20 de febrero.
Con estas movilizaciones, los sindicatos pretenden hacer presión para que la citada unidad productiva no se cierre, ya que el cese de la actividad supondría la salida de 119 trabajadores.
Aunque la empresa dice que es una decisión ya tomada y que no hay marcha atrás, el presidente del comité de empresa, José Antonio Dieste, se ha mostrado convencido, en declaraciones a Europa Press, de que todavía se puede evitar: "Seguimos insistiendo en que el cierre total es una barbaridad para nosotros y para Zaragoza".
NEGOCIACIÓN DEL ERE
En paralelo a las protestas, sindicatos y dirección del Grupo Schindler están inmersos en el periodo de consultas del ERE. Ya han tenido cinco reuniones y continuarán en la mesa de negociación el martes, aunque todavía no se han producido avances relevantes.
Fuentes sindicales han precisado que esperan conocer en el próximo encuentro más detalles sobre la propuesta de recolocaciones que esta semana ha hecho la empresa.
En principio, la compañía ha hablado en un primer momento de recolocar a unos 25 trabajadores, algunos de ellos en el propio Polígono Empresarium --donde la Schindler mantiene a 300 empleados trabajando en otros ámbitos y que no se ven afectados por el ERE--, en unas oficinas que tiene la empresa en Madrid e incluso en la factoría de Eslovaquia.
