Nada es igual en este verano que parece de mentira. No hay guiris en las playas ni japoneses en la plaza del Pilar, la costa se vacía y a más de uno le da por volver al lugar de origen para pasar el extraño estío. España se vacía, crece la España vaciada de Teruel y compañía, que se multiplica por dos en cuanto a registros móviles. También en lo demás, se supone. Cuentan en Telefónica, y lo explican con gráficos, que sus redes móviles están experimentando cambios significativos que reflejan la nueva situación, otra anormalidad generada por el covid-19 que, de paso, sirve como reflejo de la sociedad.

Entienden en la compañía de telecomunicaciones que el turismo nacional «se está volcando en segundas viviendas y los altísimos niveles de tráfico que se suelen registrar tanto en localidades costeras como interiores en agosto, este verano se están produciendo ya en julio». Además, los mayores crecimientos de tráfico se producen en municipios distribuidos por toda España, sin concentrarse como suele ser habitual en las zonas costeras.

El incremento más llamativo del tráfico móvil con respecto a enero es el 45% de Teruel, al que sigue el 23% de Huesca y el 18% de Zaragoza. Estos crecimientos «suelen estar relacionados con que muchas personas que trabajan fuera o tienen segundas residencias eligen este verano volver a sus pueblos o pequeñas localidades a pasar las vacaciones».

No hace falta más que ver la comparativa respecto a julio del 2019. Teruel casi ha duplicado el tráfico móvil con un 81% de incremento interanual. «En Semana Santa se registró un aumento que, a diferencia de otros años, se mantuvo al terminar este periodo y ahora se ha producido de nuevo un fuerte repunte por encima de lo habitual en esta época del año».

En Zaragoza se aprecia un crecimiento sostenido, con un aumento del 65% en el uso del año pasado por estas fechas, mientras Huesca casi ha multiplicado por dos su tráfico de julio respecto al año anterior (81%). Por su parte, una localidad turística como Jaca ha duplicado el tráfico en julio respecto al mismo mes del 2019. Más consumo de datos de los que se quedan, de los que vuelven a casa y de los que eligen estas zonas para pasar el verano.

En muchas localidades aragonesas se han sumado dos incrementos: el que tuvieron con el confinamiento y el actual de la demanda típica del verano como destino favorito de ocio al llegar las vacaciones veraniegas, como también se aprecia en los gráficos.

Según Teresa Herrero, gerente de estrategia y gestión de red de Telefónica, «este verano estamos viendo un crecimiento de tráfico aún más fuerte de lo habitual, y que se ha adelantado en el tiempo. Por un lado, parece que muchos españoles han iniciado su descanso en julio, sin esperar al mes de agosto para desplazarse a su lugar de vacaciones. Por otro, se observa que el turismo nacional se está volcando en segundas viviendas y localidades menos frecuentadas normalmente».

También habría que tener en cuenta el teletrabajo, que se ha disparado estos meses en muchas empresas de manera irremediable. «Con el confinamiento observamos claramente que muchas localidades veían crecer muy fuertemente su tráfico de banda ancha móvil, que se mantuvo alto durante los meses de abril y mayo, aunque al suavizarse el confinamiento fue perdiendo auge. Aunque hay variaciones muy grandes entre poblaciones, podemos decir que en algunos casos el tirón del verano se ha sumado al del confinamiento, mientras que en otros es totalmente nuevo porque esas localidades en abril tuvieron un tráfico normal. Puede influir algo, pero sobre todo es debido a los dos factores que he citado antes. El crecimiento por teletrabajo se detectó más en meses anteriores, sobre todo en marzo y abril, durante el confinamiento», concluye Teresa Herrero.