El transporte por autobús entre las localidades aragonesas se verá reducido desde este martes a la mitad, en virtud de la orden que ha firmado este lunes por mañana el Gobierno de Aragón, y que el consejero de Vertebración del Territorio, José Luis Soro, ha detallado en rueda de prensa.

Prolongando los efectos del decreto estatal del ministro José Luis Ábalos, que afecta a los trenes de larga distancia, AVE y media distancia (los de cercanías se mantienen igual), y al transporte por carretera nacional, el Gobierno de Aragón ha reducido a la mitad los autonómicos, bajo su competencia.

La orden tendrá excepciones para dar unos servicios mínimos, como "si hay una única expedición", en cuyo caso se mantendría, ha expuesto Soro. En la reordenación, que se planificará "caso por caso", se garantizará "el acceso al trabajo y los servicios básicos". En el Consorcio de Transportes del Área de Zaragoza (CTAZ), la reducción de servicio se hará desde las 10.00 horas, con este fin.

Serán las empresas las que tengan que planificar sus servicios con estas pautas, y adaptarlas por si, por ejemplo, "hay una falta de personal sobrevenido". Se aplicará desde este martes, pero tendrán un periodo de hasta cinco días para los cambios, que deberán difundir por todos los medios y comunicar al Gobierno de Aragón.

Deberán respetar las obligaciones que marca el decreto de emergencia: limpieza diaria de vehículos, venta online, en la medida que se pueda, porque "la realidad es diversa". A estas se unen medidas propias de Aragón como el cierre de puntos de información presencial, cuando no haya posibilidad de protección del trabajador, o la prohibición de que los conductores cobren el billete en efectivo, siempre que sea posible hacerlo con abonos u otros medios, como ya se implantó en Zaragoza capital.

Además, la DGA prorrogará los abonos del consorcio de transporte para que no se pierda el dinero de los viajes.

Todas estas medidas, ha afirmado Soro, se irán renovando o modificando según se compruebe su funcionamiento.