Con el accidente registrado ayer, el tramo de la N-234 comprendido entre Teruel y Barracas ha sido escenario durante los últimos seis meses de un total de tres siniestros mortales en los que se han visto implicados vehículos pesados que transportaban mercancías peligrosas. El primero de los accidentes se registró el 9 de marzo, cuando un camión cargado de nitrato amónico explotó tras colisionar con un turismo en Barracas. Fallecieron dos personas, el conductor del turismo y el chófer de otro camión que se hallaba cerca del lugar del choque. El segundo accidente con víctimas mortales tuvo lugar el 17 de marzo, cerca del pueblo de Sarrión. Un camión que también transportaba nitrato amónico frenó bruscamente para evitar colisionar con una furgoneta que había perdido el control. El vehículo pesado se salió de la carretera, pero la carga que transportaba no llegó a explotar. Perdió la vida una persona que viajaba en la furgoneta y otras tres resultaron heridas. El accidente registrado ayer ha llevado a los alcaldes de los pueblos atravesados por la N-234 a solicitar de nuevo que se aceleren los trabajos de construcción de la autovía Mudéjar o A-23.