El 75% de las reclamaciones recibidas por la Unión de Consumidores de Aragón (UCA) -es decir, tres de cada cuatro- tuvieron que ver con la cancelación de viajes durante el tiempo que duró el confinamiento hasta la vuelta de la nueva normalidad, incluyendo aquí los hoteles, apartamentos privados, los billetes de tren y de avión y el alquiler de coches, aunque avisan de que «esto todavía no ha terminado». Respecto al servicio ferroviario, «lo de Renfe se solucionó muy rápido», expresó José Ángel Oliván, secretario general de la asociación.

No obstante, los problemas se produjeron y continúan a día de hoy con las compañías aéreas: «Ponen todo tipo de dificultades a nivel europeo y español, no devuelven el dinero y habrá que llegar a los tribunales». En este contexto, Oliván informó que el Gobierno español ya había comunicado que iba a demandar a seis compañías aéreas, pero todavía no se ha llegado a producir. Las empresas del sector, según informaron desde UCA, propusieron para devolver el importe que «bastaba con dar un bono de dinero para gastarlo en otros viajes», sobre lo que la asociación recriminó que no iban a ser los ciudadanos quienes «financiaran a las compañías».

Las ayudas prestadas en cuanto al alquiler de pisos, fundamentalmente en la zona costera, conllevan «negociaciones con los propietarios para solventar la situación de los inquilinos» después de que se firmara el contrato de arrendamiento, según expresaron desde la organización.

La tercera edad aragonesa también ha tenido sus más y sus menos este tiempo con los viajes del Imserso, que han dado «muchos problemas». La devolución del dinero de estos viajes fue «difícil de conseguir» ya que «el Gobierno aplicó tan solo un 6% de la devolución de los gastos totales», lamentaron desde UCA.

FUTURAS RESERVAS / Si no se tiene el dinero, difícilmente se pueden empezar a mirar vacaciones de verano y, viendo cómo está la situación actual, es complicado plantearse una estancia en el exterior a medio-largo plazo: «Si no se reciben las cantidades adelantadas, ese dinero no te anima a salir de vacaciones», comentó Oliván. Asimismo, el futuro es incierto ya que lo establecido por el Gobierno de Aragón se traduce en recomendaciones y por ello no se pueden considerar «de causa mayor», expresó el secretario de UCA. «Un consumidor con vacaciones programadas no puede decir a la compañía que no puede viajar porque su Gobierno no lo recomienda», añadió.

Estos consejos ahora implantados no son «nada» jurídicamente hablando, «una indefinición, una situación ambigua», y sobre ello, afirma Oliván, que han recibido muchas consultas en los últimos días. De todos modos, Oliván piensa que la mayoría de las personas que se dispongan a salir ahora en verano «optarán por coger un avión». Y esta posible indefinición de la situación actual tendría «un coste económico».

Además, el secretario informó de que este año la DGA había comunicado a las asociaciones de este tipo que no iba a haber subvenciones y se les cobrará el 60% de presupuestos: «Con la gran cantidad de trabajo que tenemos y será cuando menos ayudas vamos a percibir. Nuestra asociación está en riesgo de desaparecer».