Tres personas fueron detenidas el pasado fin de semana como presuntos autores de delitos de violencia de género en distintos puntos de la comunidad aragonesa. En ninguno de los casos se registraron heridos de gravedad.

En el barrio zaragozano de Casetas, la Guardia Civil detuvo en la tarde del domingo a un joven de 27 años, después de que fuera denunciado por su mujer por agresión durante una discusión familiar en la que también resultó lesionado el hijo de ambos, menor de edad.

El arresto se produjo a las 20.30 horas, después de que la mujer y su hijo fueran asistidos de lesiones leves en el centro de salud del barrio, a donde les acompañó el supuesto agresor. Poco después, la mujer presentó la correspondiente denuncia.

Según fuentes policiales, el detenido no cuenta con antecendentes por hechos similares. Sin embargo, la denunciante informó a los agentes de que ya había sido víctima de malos tratos en ocasiones anteriores, aunque nunca había denunciado estos hechos hasta ahora.

Una hora más tarde, la Policía Local de Zaragoza detuvo a un ciudadano de origen rumano por proferir amenazas de muerte contra su compañera sentimental mientras empuñaba un cuchillo de cocina. El presunto agresor, de 37 años, fue detenido en el domicilio que compartía la pareja en un edificio de la calle del Escultor Benlliure, en el barrio de Las Fuentes.

Asimismo, en el día de Nochebuena, la Guardia Civil detuvo en una plaza de la localidad oscense de Fraga a un vecino de nacionalidad lituana como presunto autor de una agresión física a su compañera sentimental. Al parecer los hechos se produjeron en la madrugada de ese mismo día en el domicilio de la pareja, aunque el arresto se realizó horas más tarde.

Durante el año que termina, los delitos de violencia de género se han multiplicado en la comunidad aragonesa respecto a ejercicios anteriores, con especial progresión en el medio rural, donde este tipo de agresiones apenas se denunciaba.

Tres mujeres fallecieron como consecuencia de estos hechos. Las dos primeras víctimas, madre e hija, se registraron en Fuentes de Ebro a manos de la expareja de la última, y la tercera, en Cariñena.