La Policía Nacional ha detenido a tres miembros de una organización criminal de origen colombiano dedicada a la captación de jóvenes de su misma nacionalidad para su explotación sexual en Zaragoza, y ha liberado a tres de sus víctimas. De hecho fue la denuncia de una de ellas, el pasado 13 de julio, lo que dio origen a las pesquisas.

La joven, asistida por una oenegé, contó cómo la engañaron para venir a trabajar a España, prometiéndole una vida mejor, para encontrarse al llegar encerrada en un piso de la calle Miguel Servet. Allí acudían los clientes, atraídos por anuncios de internet en los que se mostraba además, como reclamo, la venta de cocaína, según pudieron constatar los investigadores. Las propias chicas eran obligadas a proporcionarla, al parecer.

Con el testimonio de la joven, y durante el registro practicado en la vivienda donde las mujeres estaban encerradas, los agentes identificaron a la responsable de la custodia como la encargada de captar a las víctimas a través de falsas promesas de trabajo.

Entre sus tareas estaba también el control de los servicios sexuales, la recepción del pago por los mismos, la tramitación de los anuncios en internet y el suministro de cocaína para el consumo de los clientes.

EN SU CÍRCULO / La madame era una ciudadana colombiana con permiso de residencia en España que había promovido este negocio contactando con familiares y amigos de su barrio de Colombia, a los que engañó con la promesa de enriquecerse en España en poco tiempo.

Del resultado del registro se obtuvieron «numerosas pruebas», según la Policía Nacional, para imputar a la principal detenida un delito de trata de seres humanos con fines de explotación sexual y otro contra la salud pública, por la cocaína.

En el piso, los agentes se incautaron de agendas con anotaciones de cuentas derivadas de servicios sexuales prestados y giros de dinero, así como de balanzas y otros utensilios para la manipulación y empaquetado de la cocaína, 14 papelinas de esta droga en una caja fuerte empotrada en un armario -cuya llave estaba entre las pertenencias de la detenida- y 1.400 euros.

Además, durante la intervención en el piso identificaron a cuatro personas más, tres mujeres y un hombre, todos de origen colombiano y con escaso tiempo de permanencia en España, entre tres y cuatro meses. Todos manifestaron dedicarse a ejercer la prostitución en el piso.

Pero una vez en dependencias policiales, dos de estas personas manifestaron ser víctimas y haber recibido amenazas en caso de no someterse a los dictados de la proxeneta, mientras que dos de las mujeres estaban en el país de manera irregular y se les incoó un expediente sancionador. Estas serían, según fuentes policiales, las otras dos detenidas como integrantes de la organización. En cualquier caso, las investigaciones policiales siguen abiertas y no se descartan más detenciones.

Esta operación se enmarca en el Plan de la Policía Nacional contra la Trata de Seres Humanos con Fines de Explotación Sexual, puesto en marcha en 2013. Desde entonces se activó la línea telefónica 900 10 50 90 y el correo trata@policia.es para facilitar la colaboración ciudadana y la denuncia, anónima y confidencial, de este tipo de delitos, aunque en ocasiones como esta tenga que ser una denuncia de las propias víctimas la que ayude a destapar la organización.