Agentes de la Policía Nacional han detenido en Calatayud (Zaragoza) a dos mujeres y a un hombre integrantes de una organización de delincuentes especializada en el robo en viviendas de personas de edad avanzada.

Las tres personas detenidas, de 22, 34 y 40 años, con varios antecedentes policiales en el caso de ellas por hechos similares relacionados con delitos contra la propiedad, han pasado a disposición judicial y han quedado en libertad, según informa la Policía Nacional.

El "modus operandi" de los detenidos consistía en localizar el domicilio de una persona mayor y después, las dos mujeres llamaban a la puerta y se presentaban "amablemente" como asistentas sociales del Ayuntamiento.

Las víctimas siempre eran personas mayores que se encontraban sin compañía en ese momento, a las que embaucaban haciéndoles creer que tenían la suerte de haber sido elegidas para ser ayudadas por el Ayuntamiento, en concreto por los Servicios Sociales.

Una vez dentro, mientras una entretenía con preguntas o conversación variada a la víctima, la otra aprovechaba con la excusa de ir al baño o tomar agua para registrar las habitaciones de forma muy rápida haciéndose con joyas o dinero.

Posteriormente, abandonaban el domicilio con rapidez y se marchaban en un vehículo que estaba esperándolas en las inmediaciones.

Las víctimas se percataban con el paso del tiempo de la ausencia de los efectos, esperando la visita de algún familiar próximo para comentarle lo sucedido, con lo que retrasaban la denuncia.

Esta circunstancia, además de que algunas de las víctimas padecían problemas serios de visión, dilataron la investigación policial.

Se realizó una campaña de sensibilización con la colaboración de los medios locales de radio en la ciudad alertando y solicitando colaboración ciudadana, así como un dispositivo de búsqueda y localización en Calatayud en horario de mañana de dos mujeres jóvenes que pudieran encajar con las sospechosas.

El dispositivo dio su fruto cuando un vehículo policial uniformado observó la presencia de dos mujeres jóvenes con vestimenta normal que se encontraban en un portal llamando a los pisos a través del portero automático, portando una carpeta con el símbolo de un corazón rojo con una cruz blanca en el fondo.