Tres personas han sido imputadas como presuntas autoras de un delito contra la propiedad industrial, por falsificar uniformes escolares de varios colegios religiosos de Zaragoza, que fabricaban y vendían en sus comercios a un precio inferior del auténtico.
La investigación se inició el pasado mes de octubre tras una denuncia del representante de la mercantil titular de los derechos de fabricación y distribución de textil y ropa deportiva que fabricaba y distribuía uniformes y chándal para un colegio religioso de Zaragoza, ha informado la Jefatura Superior de Policía de Aragón.
Los denunciantes informaron de la actividad comercial llevada a cabo por un establecimiento comercial, situado en la zona del casco histórico de Zaragoza, desde el cual se estaba vendiendo y distribuyendo uniformes y material deportivo copiando tanto el diseño como el escudo de un conocido colegio de la zona, situado muy cerca del mismo.
Se trataba de la falsificación de diferentes prendas textiles escolares, de las cuales solo tiene autorización para fabricar y distribuir la mercantil denunciante, en virtud del contrato firmado entre esta sociedad y la representante del colegio afectado.
Este colegio es de una institución religiosa que gestiona numerosos centros escolares en España, cuatro de ellos en la ciudad de Zaragoza, y que es la titular del diseño industrial y uso del distintivo registrado para la imprimación o bordado de sus prendas escolares y ropa deportiva.
Asimismo, la empresa denunciante es la autorizada para la negociación de los puntos de venta, siendo en Zaragoza dos establecimientos comerciales importantes los que pueden comercializar en exclusiva los uniformes.
También está autorizada para ejercer las gestiones necesarias de acuerdo a la legislación vigente dirigidas a prohibir e impedir la venta de estas prendas en locales no autorizados.
La actuación policial ha permitido localizar los lugares donde estas prendas eran fabricadas y posteriormente distribuidas en el establecimiento denunciado.
Se practicaron los oportunos registros e inspecciones en tres establecimientos comerciales de Zaragoza, el denunciado (en la zona Centro) y dos en el barrio de las Delicias (que distribuían al por mayor las prendas al comercio investigado), en los que se han intervenido numerosas prendas falsificadas.
La investigación ha sido desarrollada por agentes del Grupo de Delincuencia Económica de la Brigada Regional de Policía Judicial de la Jefatura Superior de Policía de Aragón.
