Tres imputados en el caso Fincas Atlanta --J. G. A., J. G. P. L. y A. L. S.-- coincidieron ayer en señalar a Eduardo Lacasta Lanaspa --en libertad bajo fianza por su presunta implicación en un agujero de 50 millones de euros-- como el único jefe del grupo inmobiliario y el responsable de todas las decisiones.

J. G. P. L. y A. L. S. indicaron que, aunque figuraban como administradores en varias empresas del grupo, actuaban bajo las órdenes de Lacasta. El primero, que tiene su propia inmobiliaria, dijo que lo hacía porque eran parientes. El segundo, albañil de profesión, aseguró que accedió a figurar en las sociedades porque su jefe se lo puso como condición para seguir cobrando su nómina de 1.300 euros.

J. G. A. explicó que era un simple administrativo que hacía de "lazarillo" para Eduardo Lacasta.