Tres personas han sido condenadas esta mañana en la Audiencia Provincial de Zaragoza a dos años de cárcel por los delitos de apropiación indebida y falsedad documental en relación con disposiciones bancarias por un total de 419.848,06 euros en una sucursal con contrato de agencia del Banco Santander en la localidad zaragozana de Gallur.
Los acusados A. S. e I. B., que son matrimonio, han llegado a un acuerdo con la acusación particular y el ministerio fiscal, al igual que el tercer imputado, J. V., a quien ha defendido el letrado Alberto Ballester Blasco, socio del despacho de abogados Senda Abogados y Asesores, de Zaragoza.
Los dos primeros han sido asimismo declarados responsables civiles subsidiarios por un montante de 419.848,06 euros. En la misma situación han sido declaradas tres sociedades mercantiles que regentaba el citado matrimonio.
Ambos cónyuges estaban acusados de haber dispuesto libremente de la citada suma sin consentimiento expreso de los clientes. Esa cantidad había sido ingresada por los usuarios de la entidad cuando los imputados regentaban la agencia del Banco Santander, entidad que ha ejercido la acusación particular tras haber indemnizado a los perjudicados.
J. V. mantenía una relación de amistad con A. S. y ambos hicieron una operación en la que el segundo necesitaba financiación. Consistió en la adquisición de una vivienda de una sociedad propiedad de A. S. y la operación de compraventa del citado inmueble se hizo a favor de J. V., gracias a un préstamo de la Kutxa, pero al final quien pagaba las cuotas del préstamo era A. S., según pudo determinar la investigación.
En el acuerdo alcanzado hoy, J. V. ha sido condenado por apropiación indebida al considerar el tribunal que el dinero con el que se llevó a cabo la operación tenía un origen ilícito, vinculado con la apropiación indebida de los ingresos de la sucursal de Gallur. El acuerdo entre las partes ha evitado que la vista oral llegara a celebrarse.
