Una trifulca entre jóvenes de distinta ideología política acabó en una batalla campal en pleno campus con el lanzamiento de objetos contundentes que causaron un herido leve.
Los hechos ocurrieron justo antes de la celebración de un acto organizado por la Unión de Juventudes Comunistas de España en Aragón (UJCE), una conferencia sobre Capitalismo, socialismo y democracia, a cargo de la diputada de Izquierda Unida en la Asamblea de Madrid, Tania Sánchez, y el concejal de IU en el Ayuntamiento de Zaragoza y Coordinador de IU Zaragoza-Ciudad, Raúl Ariza.
Los comunistas acusaron al grupo Movimiento Social Republicano (de cortes pseudonazi) de agredir a varias personas en la puerta de la biblioteca María Moliner, en la Facultad de Humanidades, aunque la otra parte se defendió, a través de las redes sociales, asegurando que fueron los jóvenes de izquierdas los que, previamente, habían causado daños en varios vehículos.
La trifulca provocó la intervención de la Policía, que se llevó a dos personas que, después de haber arrojado objetos, trataron de acceder a la biblioteca en la que se celebraba la conferencia.
IU Zaragoza condenó "rotundamente" la violencia "ejercida por un grupo de nazis" que, según la formación, "agredió a varias personas en la puerta de la biblioteca".
Según expuso IU, el acto comenzó a la hora programada --las 18.30 horas-- y "a las 19.15 horas, un grupo de unos 30 nazis encapuchados han intentando entrar a la biblioteca para boicotear la conferencia, pero varias personas que ya estaban dentro lo han impedido".
La formación añadió que "según testigos presenciales, los jóvenes fascistas han recogido vasos de cristal de los bares situados en los aledaños de la facultad y material de una obra cercana (ladrillos y barras de hierro de un andamio) y han regresado a la biblioteca donde han agredido a varias personas".
El coordinador de IU Zaragoza, Raúl Ariza, expresó su "más rotunda condena ante la violencia gratuita y sin sentido que vienen ejerciendo grupos fascistas y nazis en la ciudad" y explicó que "no se trata solo de la proliferación de pintadas con esvásticas, la presencia de grupos nazis en la Universidad de Zaragoza" sino que "el ejercicio de la violencia física no debe quedar impune y demuestra la falta de respeto por el debate político que proponíamos en esta conferencia y por la democracia".
